El “Protocolo de acuerdo de entendimiento” que antecedió la aprobación del TPOP, suscrito entre el Ministro de Relaciones Exteriores, Teodoro Ribera y la Comisión de Relaciones Exteriores fue un salvavidas generado a última hora, para hacer posible que personas como Guillier (¿ingenuo?¿hipócrita?¿ignorante’) diga: “Desataco lo que aquí se ha logrado, de lo contrario lo habría votado en contra, pero al suscribir este Protocolo, nos hacemos cargo de todas las objeciones plateadas”. Dicho Protocolo es un documento sin ningún valor legal y que trata de un burdo esfuerzo por engañar a la ciudadanía. Tal Protocolo no llegará ni a los basureros de las transnacionales. Vea, por favor, lo que informa Lucía Sepúlveda.