Las banderas republicanas españolas tenían que haber aparecido en las marchas en Catalunya frente al neoliberalismo y frente al independentismo. Sin complejos, herederos de aquellos que han hecho más por este país, sintiéndonos españoles no monárquicos, y descontentos con el Estado español controlado por la derecha española de siempre, así como con la Generalitat de Catalunya, que continúa controlada también por la derecha catalana de siempre.