“El Correo del Sur” escribía: “Se comprende muy bien que son unos huéspedes odiosos y perjudiciales para Chile. Todo el mundo sabe que el territorio de la Araucanía es un focus donde van a refugiarse todos los criminales que se escapan de las cárceles… Si queremos quitar a la anarquía uno de sus apoyos, sepamos deshacernos de la influencia araucana”.