Amor a la sabiduría, es el significado de la palabra filosofía de origen griego. La promoción de este amor por el saber, debería ser lo mínimo esperable y deseable de cualquier sistema educacional que aspire a lo superior, a lo excelso, a una verdadera educación de “calidad”. Pues bien, una surrealista propuesta ha hecho el Mineduc digna del más delirante seguidor del arte de lo insólito, lo absurdo y lo descabellado.