El lunes se hacía público el decreto presidencial donde se indulta a poco más de un centenar de personas opositoras a la revolución bolivariana. Mirando al pasado, queda un sinsabor, pues Chávez permitió en 2012 que parte de la oposición continuara en el juego político y se la volvieron a jugar con la violencia.  No hay garantías que ahora se acojan al camino de la paz, pues la ruta opositora, ya está más que claro que la marcan los gringos y la violencia para ellos sigue siendo su herramienta favorita.