El diputado René Saffirio, en el programa Tolerancia O, del domingo 9 de julio último, denunció que existe una red de dirigentes de  partidos políticos e instituciones que constituyen el núcleo de la tragedia del SENAME, especialmente,   perteneciente a la Democracia Cristiana, partido que se ha transformado en un enjambre de corrupción e intereses creados. Cita, como  ejemplo,  la Fundación Mi Casa, cuya directora general es Delia del Gatto,  acompañada de  Enrique Correa y Josefina Bilbao, como directores. Según este diputado, la Fundación habría recibido 7 mil millones de pesos de subvención. Otro organismo, también democratacristiano, es la Fundación Rodelillo, cuyo secretario ejecutivo es Tomás Walker, hermano de dos senadores, Ignacio y Patricio, y de un diputado, Matías, con el agravante de que Patricio Walker es el presidente de la  Comisión de Infancia del Senado. Una tercera es la Fundación  León Bloy, manejada por los democratacristianos Martínez-Alvear.