«En el informe de la OPAQ no hay nada que pudiese ayudar al Reino Unido a justificar su falsa versión de participación de Rusia en el incidente de Salisbury«, subrayó Nebenzia este miércoles. Según el embajador ruso, la sustancia tóxica podría ser producida en cualquier laboratorio que disponga del equipo apropiado.