Diversos países occidentales en su afán lograr influencia, comercio y bienes en territorios del este Asiático, que en ésa época estaba bajo la influencia de la dinastía China Quing, apresuraron la invasión del imperio japonés y Corea fue invadida en 1905 y luego anexada en  1910, creándose un sistema colonial mercantilista cuyo objetivo era la extracción y explotación de los recursos naturales.  Corea  permaneció ocupada hasta 1945 cuando el Imperio Japonés se rinde en la II G.M., después que EE UU., lanza  las bombas atómicas en Nagasaki e Hiroshima.