La esperanza de Washington: prolongar la guerra en Ucrania para recobrar su estatus de hiperpotencia
La operación militar rusa en Ucrania se ha convertido en una guerra verdadera entre Moscú y Washington, y eso abre la caja de Pandora. Los occidentales se adaptan. Pero ya no se trata de defender a los banderistas contra Rusia sino de debilitar a los dos bandos –lo cual incluye debilitar también a la Unión Europea. Washington pretende recuperar así su antiguo estatus de hiperpotencia y su mundo unipolar.
Porqué Rusia enloquece a Occidente
Dostoievski: «“Los rusos son tan asiáticos como europeos. El error de nuestra política en el curso de los últimos dos siglos ha sido hacerle creer a los ciudadanos europeos que somos verdaderos europeos. Hemos servido muy bien a Europa, hemos tomado una parte demasiado grande en sus querellas intestinas (…) Nos inclinamos como esclavos ante los europeos y solo ganamos su odio y su desprecio. Es hora de alejarnos de la Europa ingrata. Nuestro futuro está en Asia.”»
Gesticulaciones y cañonazos
Pedro Sánchez, presidente del gobierno español por narices, no elegido por nadie, mal parido en una moción de censura en el Parlamento, –moción asistida luego por abstenciones piadosas guiadas mucho más por el cabreo hacia Rajoy que seducidas por la ausencia de su programa–, Pedro Sánchez digo, que se niega rotundamente a convocar en España elecciones parlamentarias que perdería, conmina a Maduro a convocar elecciones en Venezuela antes de ocho días, no cumplido lo cual reconocería al agitado del colédoco Juan Guaidó. Si los militares venezolanos no tiemblan…