La familia de los Rothschild llevan siglos despertándose cada mañana con una sonrisa, sin embargo, algo los puso en alerta que les borró su acostumbrada sonrisa, porque desde la Casa Rothschild  se ordenó una venta agresiva de valores de renta variable, para generar un excedente en dinero que permitiera destinar £ 2,8 mil millones de libras esterlinas a la compra de oro.