Contexto y resumen de la desestabilización y violencia post-electoral en Bolivia
Sabedora de su derrota, la derecha boliviana busca el Golpe
La oposición de derecha boliviana se niega a reconocer el triunfo electoral de Evo Morales en las recientes elecciones y hablan de un fraude. Frente a esta actitud, el gobierno boliviano,que sabe que no hubo manipulación, reaccionó ofreciendo realizar un recuento total de votos y solicitó esto nada menos que a la OEA, que había enviado un equipo de 93 técnicos como observadores de las elecciones. Carlos Mesa, el candidato de la derecha, acepto la propuesta, pero cuando, la OEA acepto realizar el recuento, Mesa dijo que no aceptaba tal recuento. En estos días ese recuento se está realizando, voto a voto.
Bolivia: Carlos Mesa, el golpista mártir, traiciona la lucha de Luis Espinal
La oposición -en su mayoría una clase media racista tanto en Bolivia como fuera de ella- repite con ignorante convicción que en Bolivia se vive bajo una dictadura. Se trata de una oposición que sin embargo dispone de una absoluta impunidad mediática y que puede votar libremente en una elección nacional. El pasado 23 de octubre, Carlos Mesa también se sumó a esa retórica de una supuesta dictadura en Bolivia haciendo un llamado a la comunidad internacional para que eviten que Evo Morales «convierta al país en una dictadura”.
Hoy, elecciones en Bolivia: Evo Morales apuesta por gobernar hasta el 2025
Si las cosas resultan como proyectan las encuestas, el actual presidente de Bolivia podría asumir su cuarto mandato sin necesidad de un balotaje, pues en el país altiplánico si la diferencia entre el primer y el segundo candidato es más de un diez por ciento, gana el primero aun así no haya alcanzado el 50+1 por ciento de los votos.