«El Botón de Nácar»
Chile, con sus 4.000 kilómetros de costa, nos propone un paisaje terrestre y humano inquietante. Aquí hay miles de fiordos y cascadas de hielo. Aquí están las voces de los indígenas de la Patagonia, de los primeros navegantes ingleses y también de los presos políticos de la dictadura de Pinochet. Algunos dicen que el agua tiene memoria.
Sobre "El botón de nacar"
Más allá del film, una reflexión: ¿Cómo explicar la crueldad sin límites de los esbirros de la dictadura chilena?
Imposible de explicar si no supiéramos que Chile no es la excepción sino la regla en medio de la tortuosa historia de la humanidad. Para sus ciudadanos, Chile perdió su inocencia en 1973. Para los habitantes indígenas ya la había perdido en el siglo XlX.
La historia es una carnicería, escribió no sin razón Nietzsche.