‘La nueva batalla por Nicaragua’: La otra cara de las protestas
El registro realizado por Redfish, con entrevistas a distintos actores del conflicto que asola al país desde abril, muestra una realidad que ha sido deliberadamente ocultada por los medios internacionales.
Frente a las protestas que comenzaron en el país en abril de 2018 contra un proyecto de Reforma de la Seguridad Social, y que continuaron pidiendo la renuncia del presidente Daniel Ortega, el periodista Marcel Cartier viajó al lugar para analizar los hechos. Con entrevistas a opositores y partidarios del Gobierno, buscó desentrañar que está sucediendo realmente.
Presentación del libro: «Cazar al cazador»
Periodista Pascale Bonnefoy publica exhaustiva investigación sobre policías que capturaron a criminales de lesa humanidad.
Al entrar a la casa, los detectives se encontraron con Contreras sentado en un sillón. Detrás de él estaba su hijo, portando una pistola y vestido de militar, a pesar de no serlo. Sus escoltas pululaban alrededor, alertas.
—¿Cómo está, don Manuel? —comenzó Castillo.
—¿Qué te trae por acá? —preguntó Contreras, cortante.
—Acá estamos, general. Venimos con una misión no muy grata para usted. Tenemos órdenes de llevarlo detenido a Santiago.
Contreras recogió un papel fax de un escritorio y se lo mostró. —Acabo de recibir un fax de mi general Pinochet y me está dando él la instrucción de que me regrese a Santiago. Me ofreció un helicóptero —dijo.
Alemania: Comienza juicio contra un guardia de las SS que hoy tiene 94 años de edad
Stutthof fue un campo de concentración cerca de Gdansk (hoy en Polonia). Allí los nazis actuaron con la misma crueldad que en Auschwitz, Bergen-Belsen, Buchenwald, Birkenau, Dachau o Treblinka, desde septiembre de 1939 hasta mayo de 1945. Alrededor de 110.000 personas fueron encarceladas en este campo de concentración, alrededor de 65.000 no sobrevivieron. Por algunas de las atrocidades que tuvieron lugar en el campo, un ex soldado de las SS que hoy tiene 94 años, tendrá que responder ante el Tribunal Regional de Münster a partir del martes.
La última batalla de Ana González
Ella dice que “la felicidad es la alegría de vivir, y que haya dónde dormir, dónde anidarse en una casita, tener hijos, que los hijos se eduquen, que todos los jóvenes estudien, que los niños sean felices y que los viejos sean bien cuidados por todo lo que han hecho en su vida. Yo creo que es muy difícil ser feliz en las circunstancias en que estoy, porque ser feliz es no saber de la infelicidad, y algunos muy cercanos se han dedicado a hacerme la vida imposible. Pero hay sonrisa, porque lo que la dictadura quiso es que yo, como tantas, nos fuéramos a la casa a llorar y quedarnos muy tranquilas. Pero no lo lograron”.
Con una paloma de la paz y las palabras «Por la libertad», en color rojo, pintan la tumba del dictador Franco
El artista gallego Enrique Tenreiro se convirtió este miércoles en el protagonista del día por su acción protesta. Se desplazó hasta la Basílica del Valle de los Caídos por la mañana, se puso de rodillas sobre la tumba del dictador Francisco Franco y a toda prisa dibujó con pintura roja una supuesta paloma de la paz junto al mensaje “por la libertad”.
Doble paliza de Cuba a Estados Unidos
Estados Unidos fue derrotado esta semana por Cuba y una abrumadora mayoría de estados en la Asamblea General de la ONU. [NdR.: El voto norteamericano por mantener el bloqueo solo fue acompañado por el de Israel]. No solamente La Habana logró la aprobación por vigésima séptima vez consecutiva de la resolución contra el bloqueo a que la somete el poderoso vecino del norte. En votación por efectuarse en horas también derrotaría una retorcida maniobra de este, que intentaba desvirtuar el sentido de la resolución y justificar desesperadamente la brutal medida de fuerza contra el pueblo cubano.
Los condenados de la tierra. Frantz Fanon
«En las colonias, la verdad aparecía desnuda; las «metrópolis» la preferían vestida; era necesario que los indígenas las amaran. Como a madres, en cierto sentido. La élite europea se dedicó a fabricar una élite indígena; se seleccionaron adolescentes, se les marcó en la frente, con hierro candente, los principios de la cultura occidental, se les introdujeron en la boca mordazas sonoras, grandes palabras pastosas que se adherían a los dientes; tras una breve estancia en la metrópoli se les regresaba a su país, falsificados. Esas mentiras vivientes no tenían ya nada que decir a sus hermanos; eran un eco; desde París, Londres, Ámsterdam nosotros lanzábamos palabras: «¡Partenón! ¡Fraternidad!» y en alguna parte, en África, en Asia, otros labios se abrían: «¡…tenón! ¡…nidad!» Era la Edad de Oro. «
Los médicos civiles que trabajaron en la clínica de la DINA
“¿Qué pasa con los médicos civiles? Buena pregunta porque ninguno ha sido procesado. Atendiendo sus edades, la gran mayoría aún está trabajando, por ejemplo, en universidades dando clases, otros en clínicas privadas y algunos en el Ejército en las unidades médicas”. 50 trabajaron en la Clínica Santa Lucía . “Ahí es donde hay un acento importante que darle a esta investigación porque estos médicos civiles dieron inicio al trabajo de la Brigada de Sanidad, que operó durante toda la dictadura” relató Romina Ampuero, Directora del Sitio de Memoria y coordinadora del equipo que indagó en estos hechos.
Recordando a las Brigadas Internacionales en tiempos de Bolsonaro
El domingo pasado, en medio de una lluvia pertinaz, conmemoramos en el popular distrito de Horta-Guinardó de Barcelona los 80 años de la partida de la ciudad de las Brigadas Internacionales. Cuando las Brigadas se despidieron, Dolores Ibárruri, La Pasionaria, exhortó a las generaciones siguientes a recordar a sus hijos quiénes habían sido aquellos hombres y mujeres que habían abandonado casa, trabajo, familia, para luchar por la libertad y la justicia en tierras lejanas. Llevaba razón. Solo la desmemoria impuesta por los vencedores explica que los más jóvenes desconozcan, por ejemplo, la historia de las más de 500 mujeres que se incorporaron a las Brigadas desde diferentes rincones del mundo.
Entrevista sobre el libro “Mañana será historia, diario urgente de Venezuela”
Un cronista toma su mochila, un grabador, su cuaderno y viaja hasta ese vórtice del huracán americano llamado Venezuela. Lo hace en enero de 2013, es decir, dos meses antes de la muerte de Hugo Chávez. Y llega para quedarse y anotar, en una bitácora de viaje sensible y palpitante, los contornos de un proceso vivo, pleno de dificultades, contradicciones y desafíos. De este modo, es testigo directo de cada crisis económica, de las batallas por defender las conquistas del proceso bolivariano, de los avances y retrocesos de chavistas versus escuálidos, de cada contienda electoral donde se juega buena parte del futuro del país.