Murió Finisterre, el inventor del futbolín
Cuentan quienes le trataron en la recoleta y románica ciudad del Duero que a don Francisco lo que más le motivaba en el intenso recordatorio de su larga vida (falleció a los 87 años) fue la circunstancia en que se gestó su invento. Herido Finisterre durante la guerra, el futbolín nació para que los niños ingresados en el mismo hospital de Montserrrat de Barcelona donde él se encontraba pudiesen jugar al fúbol. Se basó para ello en el tenis de mesa y recurrió para construirlo a un carpintero vasco, don Francisco Javier Altuna.
A 30 años de su muerte: La rabia de Chaplin

Un film al rescate de la Memoria: «Casa Grimaldi»
1890-1907: de una huelga general a otra. Continuidades y rupturas del movimiento popular en Chile[1]
Si hasta fines del siglo XIX, la cultura, el proyecto y el ethos colectivo del movimiento popular organizado podía sintetizarse en la aspiración a la “regeneración del pueblo”, hacia la época del baño de sangre de la escuela Santa María, el movimiento obrero ya enarbolaba la consigna más radical de “la emancipación de los trabajadores”.
Gabriel Salazar, Historiador: «Los poderosos no generan cultura»
Es importante decir que todo lo mostrado por esta marginalidad, es cultura. La clase dominante, los ricos, los poderosos, no son generadores de cultura en Chile. Lo que hacen es traer desde otras partes y nos obligan a aprender y a repetir. Desde la música hasta el wiskhy, es de afuera. En cambio los pobres, cantan sus dolores, sus propias frustraciones y cuando la clase dominante quiere mostrar la cultura nacional, echa mano a esta cultura popular.
4 feb. 1962: II Declaración de La Habana, tan vigente como hace 44 años

¡Fidel Castro, de visita en Venezuela!
¿Qué Pasaría?
Algo tarde, pero vale la pena. Pendiente la sonrisa, faltan otros mal nacidos
¿Habrán quemado los lingotes de oro junto a él la tarde del martes? ¿Habrá que quemar también la mala semilla llamada Augusto III y su rancia pachotada?. Tal vez con “esa llama de la libertad que encendiste el 11 de septiembre para siempre”, como dijo la Lucía chica. “¿Qué hizo el infierno para merecer esto?”, escribió mi amigo Palma en Página 12. ¿Qué hicimos nosotros aquí en la tierra para merecer a un ‘Tercero’?, ¿Qué hicieron los fumones de pasta base para merecer esa ceniza?, pregunto yo.