No callaba  ante las violaciones de los Derechos Humanos y siempre estaba en primera línea en las manifestaciones en defensa de la independencia del Sáhara Occidental.   Falleció el 24 de enero de 2018 y su entierro fue una de las  mayores concentraciones de saharauis en el Aaiún desde el campamento reivindicativo de Gdeim Izik, desmantelado por las fuerzas de ocupación marroquíes en noviembre de 2010. Era Deida Uld El Yazid, de 94 años, el “abuelo de la resistencia pacífica saharaui”.