Sólo 6 diputados –Pouria Amirshahi, Isabelle Attard, Sergio Coronado, Noel Mamere, Barbara Romagnan y Gerard Sebaoun– votaron contra la ley que renueva y extiende el estado de urgencia en Francia. Ellos comprendieron que quienes ordenaron los atentados perpetrados son falsos aliados de Francia y que la verdadera respuesta a los atentados sería renunciar a las alianzas que ensucian la República Francesa. En vez de ceder a la histeria generalizada, estos diputados optaron por la defensa de la democracia.