Esta última [NdR.: la Carta de la Organización de las Naciones Unidas.] tuvo como principal objetivo substituir las operaciones militares unilaterales por un sistema multilateral basado en la cooperación y en el rol primordial del derecho y las instituciones. Sería dramático que, sobre la base de la emoción comprensible que genera la multiplicación de los atentados terroristas, terminemos por olvidar dichas características ».