El descrédito contra los parlamentos comunales pareciera reflejar el temor de la bancada de la MUD, que no solo buscaría asfixiar al ejecutivo, sino que tendría que abrir otro frente de confrontación directo con un pueblo que a mayor organización sería capaz de defender el ejercicio soberano de sus gobiernos comunales como posibilidad más real de socialismo. Interesante ver una disputa por la renta y el poder que involucre más al pueblo en su papel protagónico. ¿Acaso la jugada de la MUD será querer anular leyes del poder popular y/o reformar la constitución? ¿Y después? ¿Quién escribirá la historia?