El multimillonario padece de un narcisismo sin parangón en la historia de la humanidad: dicen los cercanos que sólo lee aquellos informes en que se menciona favorablemente su nombre varias veces, además, es más nepotista el mismísimo Napoleón Bonaparte – nombraba reyes a sus estúpidos hermanos y hermanas – pues Trump lo hace con su yerno, hijos e hijas, que están muy cómodos en la Casa Blanca.