Luis Chandía, Presidente del Sindicato de la mina y quien hizo el viaje desde Curanilahue hasta Santiago, declara:»Muchos de nosotros no tenemos que comer, sin nuestros sueldos no podemos alimentarnos ni darles de comer a nuestras familias y hoy nos han dicho que este es un conflicto entre privados. Sentimos que hemos perdido el tiempo viniendo a la capital». Hoy están a 750 m de profundidad, pero ante el abandono por parte del gobierno, bajarán a mayor profundidad, con el enorme riesgo que eso significa para sus vidas. El senador Navarro afirma: «Si el Gobierno no interviene, habrá consecuencias fatales en Curanilahue». Los dueños de esta mina: Rodrigo Danús y Paul Fontaine.