Las recientes declaraciones del excomandante en Jefe de la Armada, y presidente de la Liga Marítima de Chile, el almirante (r) Miguel Ángel Vergara, son demostrativas y son un ejemplo de la cultura antidemocrática en las FF.AA. y en particular en una de las ramas armadas que ha sido incapaz de reconocer ni menos cooperar con las investigaciones de los crímenes cometidos, en el pasado por efectivos navales, en buques y recintos militares de la Armada.