Entre otras omisiones [en su discurso del 21 de mayo] nos permitimos señalar que con una pequeña dosis de equidad en su discurso de hoy debiera haber incluido una respuesta a las demandas de un centenar de ex presos políticos que llevan más de cuarenta días en huelga de hambre. Si debido a espacio o tiempo no se nos consideró, estimamos que el anuncio de esterilización de los perros vagos está un poquito más abajo en materia de urgencias, ya que se trata de compatriotas suyos que se jugaron la vida para que pudiéramos recuperar la democracia y ese sólo hecho merece un mínimo de respeto.