Haití fue el primer país que libero a los esclavos y el primero del Caribe en ser independiente (1804)
Toussant Louverture, un ex esclavo liberado, logra derrotar  a las tropas españolas y, en 1778, es dueño prácticamente de Santo Domingo. Napoleón, como buen nepotista, nombra a su cuñado Víctor Leclerc como gobernador de la Isla; éste traiciona a Toussant, ordena detenerlo y lo deporta a Francia, país donde el precursor de la independencia fallece. Su sucesor, Jacques Dessalines, proclama la independencia de Haití el 1º de enero de 1804, en la Plaza de Gonaives.