Desde los albores de la Conquista, hasta la instalación del modelo neoliberal, el Wallmapu ha sido objeto de constantes invasiones. Tanto el proyecto colonizador hispano, como la política de ocupación de territorios del Estado chileno y los proyectos extractivistas del gran capital, han operado con extrema violencia contra el pueblo nación mapuche. Esto no nos deja indiferentes. Como historiadores, como profesionales de las Ciencias Sociales y como sujetos políticos, hemos manifestado, en más de una ocasión, nuestro repudio a estas prácticas coloniales y hemos hecho explícita nuestra solidaridad con las comunidades afectadas.