Un vendedor ambulante más, despreciado por su sociedad. Un niño pobre más, que sueña tener un micrófono para cantar, un preso más, que retorna a la otra cárcel, la de la libertad. Un buen amigo como de costumbre que lo recibe. Una madre soltera más, con muchos hijos, que vende drogas. Extractos espejados del paraíso villero, esqueletos de autos robados desmantelados y prendidos fuego. La utopía atrás de 200 mil dólares ajenos, diferentes clases sociales idénticas traiciones, eternos tejes manejes…