Chile/Perú y La Haya: Epidemia de fiebre de Chauvin
¡Cuánto daño ha hecho este falso nacionalismo, la patriotería, la xenofobia que políticos de Chile y Perú han usado para ganar un puñado de votos, acentuando la discordia! Da tanto asco el expresidente Alan García llamando a embanderar las casas de Perú el 27 de enero, como el diputado Jorge Tarud, llamando a que Chile desconozca el fallo internacional sometiéndolo a plebiscito. Alan, el gran nacionalista, que no tuvo empacho en entregar las riquezas mineras peruanas a las transnacionales a cambio de un “óbolo voluntario”. Y Tarud, el hombre de Estado que quiere desconocer tratados y acuerdos internacionales firmados y ratificados por Chile, pero que está en contra de convocar a una Asamblea Constituyente porque “crea incertidumbre nacional e internacional”. Son de la misma calaña. Apristas y fujimoristas antichilenos como UDIs y PPDs antiperuanos.
La identidad como argumento de la extrema derecha
La crisis europea presenta, en su estado actual, una de las consecuencias más significativas en términos políticos y sociales: el rebrote de los discursos identitarios que conforman una estrategia directa para la captación ideológica de la población. Es un recurso añejo que se actualiza desde la extrema derecha europea quien encontró en la agitación social, producida por la debacle económica, el fermento propicio para sus metas políticas.