«Al mismo tiempo, el contenido de los mensajes de radio interceptados (367 recibidos sólo en las últimas 24 horas) muestra que los combatientes de la resistencia se encuentran en una situación desesperada, prácticamente sin comida ni agua. Exigen insistentemente el permiso de las autoridades oficiales de Kiev para deponer las armas y rendirse. Al mismo tiempo, se constató que los representantes de las autoridades del régimen ucraniano prohíben categóricamente la rendición y les amenazan con posteriores fusilamientos en condiciones de guerra si se rinden.»