Brasil, ¿primer caso de esclavitud contemporánea?
El hacendado había retenido sus cédulas de trabajo y hecho firmar documentos en blanco. Trabajaban más de doce horas diarias con un descanso de media hora para comer, con un día libre a la semana. Dormían en ranchos de la hacienda en hamacas o redes, sin electricidad, camas ni armarios. La alimentación era insuficiente, de mala calidad y se descontaba de sus salarios. No tenían atención médica pese a enfermarse con regularidad. Las labores las realizaban bajo órdenes, amenazas y vigilancia armada.
Elecciones en Brasil: criminalización de la política, retroceso de la izquierda, autocrítica y resistencia
Frei Betto, en una valiente autocrítica, señala que en 13 años no se promovió la alfabetización política de la población ni se trató de organizar las bases populares. Tampoco se valoró los medios de comunicación que apoyaban al gobierno y, mucho menos, se dio un paso hacia la democratizar los medios.
Lo que EEUU tiene para proponer a América Latina
Los países de América Latina han tenido su más grande ciclo de desarrollo, cuando se han distanciado de EEUU, han privilegiado los procesos de integración regional y los intercambios Sur-Sur. Sus perspectivas están en mantener esa dirección, incluido un estrechamente de la relación con los Brics y no con retomar políticas de libre comercio, vinculadas al modelo neoliberal.
El escenario regional después de Dilma
Sería equivocado pensar que estamos volviendo al pasado, por más que algunos analistas crean que se están perdiendo conquistas. La realidad indica que la región camina hacia adelante pero, en lo inmediato, lo que tenemos enfrente no es la sociedad igualitaria y justa con la que soñamos, sino un inminente choque de trenes entre los de arriba y los de abajo, y luchas entre clases, razas, géneros y generaciones. Hacia ese desenlace va la humanidad, y ese es el futuro a mediano plazo que se avizora en la región.
El retroceso no empieza ahora
¿Qué vendrán tiempos difíciles para los hermanos brasileños? Sin duda. Pero ojo al gol…el viraje conservador no empieza hoy…hace un buen rato que los trabajadores empezaron a pagar el ajuste del gobierno de Dilma. Entre otras cosas, la presidenta cae porque perdió su base de sustentación, porque abandonó a quienes la votaron y a los movimientos sociales que llevaron al PT al gobierno.
Dilma, la izquierda subprime y el ajuste de cuentas en la cueva de Alí Babá
Todo eso funcionaba mientras la nueva izquierda pudiese seguir representando a los dominados (y no se olvide de cuál es su rol), y la derecha no se sintiese con la fuerza suficiente como para dominar directamente. Como es bien sabido, en Chile −como en Brasil− ambas condiciones necesarias para dicha forma de dominación están flaqueando. Tanto la derecha está cada día más arrogante como la nueva izquierda representa cada día menos a los agobiados.
La tragedia brasileña
De la tragedia brasileña se desprenden muchas lecciones, que deberán ser aprendidas y grabadas a fuego en nuestros países. Menciono apenas unas pocas. Primero, cualquier concesión a la derecha por parte de gobiernos de izquierda o progresistas sólo sirve para precipitar su ruina. Y el PT desde el mismo gobierno de Lula no cesó de incurrir en este error favoreciendo hasta lo indecible al capital financiero, a ciertos sectores industriales, al agronegocios y a los medios de comunicación más reaccionarios.
Y hubo golpe en Brasil
El sueño de la derecha brasileña, desde 2002, se ha realizado. No bajo las formas anteriores que ha intentado. No cuando intentó tumbar a Lula en 2005, con un impeachment, que no prosperó. No con los intentos electorales, en 2006, 2010, 2014, cuando fue derrotada. Ahora encontraron el atajo, para interrumpir los gobiernos del PT, aún más cuando seguirían perdiendo elecciones, con Lula como próximo candidato.
Brasil ya no será igual
Cualquiera que sea el desenlace inmediato de la más profunda y prolongada crisis que el país ha vivido, Brasil no saldrá igual, nunca más será el mismo que fue. Será mejor o peor, pero nunca más el mismo. La crisis devastó la credibilidad de todo el sistema político, liquidó la legitimidad del Congreso, propagó la falta de creencia en el Sistema Judicial e hizo que el pueblo sepa que no basta votar y ganar cuatro elecciones para que el mandato presidencial sea respetado.
Sudor de sangre: la realidad de la minería en Brasil
“Es común para un trabajador, hoy, en la minería, estar más de diez años sin vacaciones, porque el contrato es de un año, vence, y él es contratado de nuevo por la misma o por otra empresa y pierde este derecho. No tiene ningún beneficio la tercerización”, dice Marta Freitas, Directora de la Secretaria de Salud de Minas Gerais.