Elecciones en la capital argentina y varias provincias
En lugar de democratizar los partidos, de garantizar la participación decisoria de sus afiliados en la selección de candidatos y programas, la clase política ha importado algo similar a las primarias estadounidenses, que surgieron para paliar la indiferencia. El ciudadano no elige sino que opta por candidatos que fueron decididos por alguna oligarquía partidaria a puertas cerradas. El lugar de decisión está también vedado a la “base” partidaria.