Según los documentos e informaciones que narraba el general José Ramón Diego, en el plan militar entre Hasán II y el PSOE se vendió a Marruecos un buque de guerra, vehículos TT, morteros, cañones SR y miles de toneladas de armas ligeras. En cuanto al armamento ligero era indudable que se dirigía a la guerra del Sáhara y buena prueba de ello ofrecerían luego los saharauis al exhibir las armas capturadas.