La trastienda de las “renuncias” de los obispos Cristián Caro y Gonzalo Duarte
Los obispos Cristián Caro y Gonzalo Duarte han intentado maquillar su salida afirmando que si el Papa aceptó sus renuncias es porque cumplieron la edad límite. No es así. En los expedientes que hoy analiza el Vaticano hay evidencias de que en las diócesis de Valparaíso y Puerto Montt se bloquearon investigaciones de abusos sexuales: se protegió a curas abusadores. Esas redes de protección, amparadas por algunos obispos, están ahora en la mira del Vaticano. Las nuevas investigaciones eclesiales apuntan a desarticular esas redes que han permitido el abuso de conciencia sobre jóvenes. [ La cosa es grave porque se distorsiona el celibato, satanizando la relación con mujeres, y en cambio se naturaliza la homosexualidad siendo el coto de caza los jovencitos que están a la merced de los directores espirituales quienes van distorsionando su conciencia y actúan a veces por abuso de poder.]
Mauricio Pulgar, ex seminarista: “En la Iglesia hay redes de sexo, poder y drogas”
Todavía sus ojos son dos charcos que tiemblan cuando tiene que recordar el día que logró obtener la confesión del presbítero Humberto Enríquez, a quien conoció en el Seminario Pontificio Mayor San Rafael de la diócesis de Valparaíso. Mauricio era profundamente católico, había sido acólito en la Parroquia Nuestra Señora del Rosario en Quilpué, desde los 13 años quería ser sacerdote. Por eso, según cuenta, cuando Enríquez lo drogó para violarlo, el mundo –o el único que conocía– se desplomó.
Papa aplica “tolerancia cero” contra los abusos
Cuando recientemente el Papa reunió a los obispos chilenos en Roma, les dijo, “Los problemas que hoy se viven dentro de la comunidad eclesial no se solucionan solamente abordando los casos concretos y reduciéndolos a remoción de personas; esto –y lo digo claramente- hay que hacerlo, pero no es suficiente, hay que ir más allá…”
La Iglesia Católica Chilena en la peor crisis de toda su historia
La verdad, por más que duela, es sano reconocerla. Y respecto de la mayor institución de carácter espiritual que ha tenido Chile desde sus inicios -la Iglesia Católica- debemos reconocer que sufre la peor crisis de toda su historia. Esto duele mucho más si se contrasta con una Iglesia que se comprometió profundamente, hace pocas décadas, con los sufrimientos y esperanzas del pueblo chileno. Entre las décadas del 60 y del 80 tuvimos una Iglesia que promovió la justicia social; que alertó sobre la radicalización y violencia que desgraciadamente acompañaron muchos de los cambios sociales llevados a cabo; y que, sobre todo, se jugó abnegadamente por la defensa de la dignidad y los derechos humanos tan pisoteados durante la dictadura.
Francisco Aceptó la renuncia de Juan Barros, Gonzalo Duarte y Cristián Caro
El Papa Francisco va con prudencia, pero también con firmeza y decisión: hoy, hacia las 05:00 horas en Chile, se conoció la noticia de que el Papa había aceptado las renuncias del obispo de Osorno, Juan Barros; de Valparaíso, Gonzalo Duarte y de Puerto Montt, Cristián Caro. Aún faltaría la aceptación de las respectivas renuncias de los otros tres obispos discípulos de Karadima. En la mafia corrupta hay muy pocas excepciones de prelados que merecen respeto y confianza.
Carta del Papa Francisco a los Obispos de Chile
Teniendo en cuenta todo esto les escribo a ustedes, reunidos en la 115ª asamblea plenaria, para solicitar humildemente Vuestra colaboración y asistencia en el discernimiento de las medidas que a corto, medio y largo plazo deberán ser adoptadas para restablecer la comunión eclesial en Chile, con el objetivo de reparar en lo posible el escándalo y restablecer la justicia.