La Unión Europea (UE) y Marruecos firmaron ayer una nueva tropelía: suscribieron un acuerdo de pesca que choca frontalmente con una sentencia del Tribunal de Justicia de la UE (TUE). La UE y especialmente España, que es quien más se beneficia de esta acuerdo, pues, legalmente, no pueden faenar en aguas del Sáhara Occidental contempladas en el acuerdo, porque es un territorio pendiente de descolonización. A pesar de ello, ayer se firmó este golpe en el que los pesqueros españoles se convierten en ladrones. No es un acuerdo de pesca, es un acuerdo de ladrones.