Al tercer día, después de los hechos casi naturalizados por parte del estado de una represión categoría masacre, logré fotografiar cómo lanzaban del «zorrillo» un químico verde. Aún no se sabe con certeza que es, pero parece ser un neurotóxico y Claudia que socorrió a un pibe que lo aspiro nos supo decir que quedó con compromiso neuronal. Fede fotografió enfrentando duras amenazas y algunos golpes como detenían a chicos/as de la primera línea de manera inhumana, tomándolos de la garganta, reduciéndolos entre muchos/as pacos/as, a veces le ponían el escudo directamente para que no pudiera fotografiar y lo miraban de manera tal que le hacían entender que en cualquier momento también lo golpearían.