Hoy desgarran vestiduras y hablan de «terrorismo», «defensa de la legalidad», «fortalecimiento de la democracia», etc. pero se olvidan que hasta hace pocos años, siendo miembros del Congreso, defendían a brazo partido a organizaciones criminales, como Colonia Dignidad, responsable de torturas, asesinatos y desaparecimiento de ciudadanos chilenos y extranjeros, en un territorio que funcionaba como un estado propio dentro de  esto que llaman República de Chile. Ahí están las innumerables declaraciones firmadas por parlamentarios de la UDI y RN. El Presidente Piñera incluso declaró que «En los 80 conocí un informe de Hernán Felipe Errázuriz sobre Colonia Dignidad», es decir, todos sabían lo que ocurría allí. ¡Hipócritas!