Los detenidos fueron trasladados hacia el recinto clandestino de detención denominado Casa de la Cultura de Barrancas, en la actual comuna de Pudahuel. Al día siguiente, las víctimas fueron sacadas de ese lugar y llevadas a los alrededores del Túnel Lo Prado donde se le ordenó a cada uno que huyera para simular una fuga. Los detenidos rogaron y suplicaron, y a sabiendas de que entre esas personas se encontraba una mujer embarazada, los uniformados, liderados por Cardemil, los acribillaron  por la espalda con ráfagas de ametralladora.