La intervención de la OTSC ( Armenia, Bielorrusia, Kazajstán, Kirguistán, Rusia y Tayikistán.) contra el terrorismo en Irak y en Siria puede constituir el inicio de un orden mundial basado en la cooperación y la defensa de las poblaciones civiles o, por el contrario, de un periodo de enfrentamiento este-oeste con Occidente apoyando abiertamente el terrorismo. Contrariamente a una creencia generalizada, el objetivo de ese despliegue militar no sería tanto defender Irak y la República Árabe Siria como defender los Estados miembros de la propia OTSC.