Hace un tiempo convocaron al OLCA a una reunión para discutir las apuestas programáticas de una de las candidaturas presidenciales, agradecimos el gesto, pero no fuimos… optamos por restarnos, fundamentalmente porque nuestro caminar al lado de comunidades víctimas del extractivismo nos ha enseñado que administrar un sistema de muerte no puede generar vida, y la vida es nuestra fuerza motriz, desde ella partimos y hacia ella vamos. Por lo tanto, estamos más empeñados en articular las experiencias de vida que creativamente se vienen desplegando, que en enfrascarnos en discusiones poco fértiles, no porque no sean honestas las semillas, sino porque la tierra político partidaria de este país, está demasiado reseca y estéril.