Vladimir Putin: pedagogía del ajedrez geopolítico
Una partida de ajedrez se gana legítimamente con inteligencia holística. De modo fraudulento, con un puñetazo al adversario o rompiendo el tablero.
El juego está declarado para este siglo: el mundo es un espacio de convivencia entre naciones en un plano de igualdad y respeto o no será planeta. Lo anterior, puesto que sólo el diálogo armonioso entre soberanías respetuosas produce un desarrollo social de la Tierra en toda su dimensión material y espiritual, incluyendo la cultura, las ideologías, los pensamientos, lo humano.
ONU: ¿continúan las intrigas?
La idea era brillante: lograr un doble triunfo. Por una parte, intervenir en Siria permitía deshacerse de un stock de armas inmenso que los consorcios internacionales tienen proyectado vender en la medida que se produzcan guerras o se siga impulsando la carrera bélica, a la vez que se desviaba la atención del serio conflicto que se posee internamente pues es el primer país deudor en el orbe…y éstas se acumulan de modo gigante. De igual modo, se lograba dar un mensaje global de que el patrón del mundo había alzado su voz.