El Primer Ministro Netanyahu declaró un alto el fuego sin pedir la aprobación de su gobierno de coalición, pasando por sobre los planes del ministro de defensa Liberman, líder de la extrema derecha israelí, que pide un “golpe severo” en Gaza. Para Netanyahu es Irán el principal desafío, y no sólo de Israel sino del planeta entero e incluso el cosmos. Descarta una “solución” militar contra Gaza por su inutilidad, probada en tres guerras. Prefiere una atrocidad controlada contra la Franja, mientras sigue con su estrategia de aislar a Teherán, presionando a Europa y los países árabes.