[…] es importante que sepas que no vienes a la Argentina en cualquier momento. En 1976, mientras tu tenías tan solo 14 años y tu país festejaba dos siglos de su independencia, nosotros comenzábamos el período más trágico de nuestra historia, con la instauración de un terrorismo de estado que sometió a nuestro pueblo a la persecución, la tortura, la muerte y las desapariciones para quitarle su derecho a la libertad, independencia y la soberanía.
Te escribo como sobreviviente de ese horror que, como muchos otros, fuimos víctimas de persecución, cárcel y torturas por defender los derechos humanos frente a las dictaduras latinoamericanas que impusieron la Doctrina de la Seguridad Nacional y de la “Operación Cóndor”, con el financiamiento, adoctrinamiento y coordinación de Estados Unidos.