En 1845, el polaco Ignacio Domeyko, que años después sería también rector de la Universidad de Chile, recorrió la Araucanía. En esta columna el historiador Rafael Sagredo reflexiona sobre dos características centrales de los diarios de Domeyko: la Araucanía le recuerda a “su amada Polonia” y su histórica lucha por la libertad en contra de los rusos; y valora a los mapuche, sus creencias y costumbres. Se trata de uno de los últimos textos hechos en Chile que busca entender y es empático con un pueblo que ya había comenzado a ser marginado, discriminado y estigmatizado”.