Esa noche en Chuqui…
La negrura de la noche permitió que los vecinos, sumergidos en el anonimato, pudieran seguir a los gringos a prudente distancia en prueba irrefutable de que la curiosidad suele vencer al espanto.
La negrura de la noche permitió que los vecinos, sumergidos en el anonimato, pudieran seguir a los gringos a prudente distancia en prueba irrefutable de que la curiosidad suele vencer al espanto.