A lo largo de su carrera la exsenadora ha recaudado más de 400 millones de dólares como apoyo a sus campañas electorales. De ellos, 21,8 millones son procedentes del sector financiero, de valores e inversiones y de la banca comercial. Además, Wall Street no solo le entrega donaciones, sino que paga sus discursos, con una media de 225.000 dólares por conferencia.