La carta de un profesor venezolano a sus alumnos chilenos caló muy hondo. Aun no desaparece en nuestras almas la vergüenza provocada por la acción cobarde e infame de quienes le quemaron sus pocas pertenencias a migrantes venezolanos, y los ex alumnos chilenos de la Universidad Central de Venezuela sacan la cara para tender una mano fraternal y solidaria. Chile no es el lumpen, ni el de abajo, ni el de arriba. Chile es su pueblo cálido y fraternal con todos los latinoamericanos…