La memoria y mi historia de Chile (Cuento en 100 palabras)
Debo relatar mi historia de Chile en 100 palabras, obvio. Mi primer suceso en la vida fue mi doctorado del kindergarten: pasé colado al mundo de las letras. Del ABC, del primero preparatoria, hasta mi primera crónica del ejercito y de nuestra visita a la distribuidora de la Coca-Cola.
La mujer que fue Lunes (Cuento en 100 palabras)
Ya había llegado la mujer que fue lunes. Nos sentamos con ella al borde del cerro Santa Lucia. Intuíamos que podía pasar algo.
– No están matando a todos los dirigentes – nos dijo.
– No es nuevo, le respondimos.
Palestina: Una lección de solidaridad

"Esto tiene que terminar. Hemos de abandonar todo lo demás y dedicar nuestras vidas a conseguir que esto termine. No creo que haya nada más urgente. Yo quiero poder bailar, tener amigos y enamorados y dibujar historietas para mis compañeros. Pero, antes, quiero que esto se termine. […]No fue esto lo que yo quería cuando me trajeron a esta vida. No es esto lo que esperaba la gente de aquí cuando vino al mundo. Este no es el mundo en que tú y papá querían que viviera cuando decidieron tenerme".
Apuntes de un cesante (Cuento de 100 palabras)
He quedado cesante. Sin pan, mi familia, la mesa desierta, ha fallecido.
Recuerdo mi trabajo a diario, y sin él se me antoja matarme.
Añoro mis hijos y mi mujer, su beso que me regalaba al terminar mi faena, su calentura de hacerme el amor para que fuera un trabajador feliz.
Crónica de una mujer que no tenía zapatos

Su sueño: «llegar a tocar como Claudio Arrau, como Roberto Bravo»

El imperio y la isla independiente
“Por supuesto que a Cuba se le ha dejado poca o ninguna independencia con la Enmienda Platt y lo único indicado ahora es buscar la anexión. Esto, sin embargo, requerirá algún tiempo y durante el período en que Cuba mantenga su propio gobierno, es muy de desear que tenga uno que conduzca a su progreso y a su mejoramiento. No puede hacer ciertos tratados sin nuestro consentimiento, ni pedir prestado más allá de ciertos límites y debe mantener las condiciones sanitarias que se le han preceptuado, por todo lo cual es bien evidente que está en lo absoluto en nuestras manos y creo que no hay un gobierno europeo que la considere por un momento otra cosa sino lo que es, una verdadera dependencia de Estados Unidos, y como tal es acreedora de nuestra consideración.” … [Leonard Wood]
Las dos caras de la Nieve
“La nieve no es más que la lluvia con vestido de novia”
Despavorida corre la gente a refugiarse a los albergues, lo que fue una sonrisa incolora de invierno, ahora se convierte en mueca siniestra, canino colmillo que va lacerando gargantas, músculos y tendones, que va congelando a los que no tienen casa, que va decorando las calles y las plazas de muertos, pálidos, azules y yertos..
Porque cuando no es el lugar ni el momento adecuado la nieve se transforma en cocaína, en heroína villana que induce comas letales sobre los campos, durmiendo las hortalizas, las frutas, pastizales y trigales para siempre.
Si solamente escribo
No importa si tallas una lágrima
No importa, si ella rima con la vida
No importa si tu verso es doloroso
Que estemos nuevamente al empezar
Vamos, inventemos nuevas sendas
La esperanza es la canción vital
Hay que abrir al sol todas las puertas
Y el mañana echar a caminar
La Historia me absolverá
Parecía que el Apóstol iba a morir en el año de su centenario, que su memoria se extinguiría para siempre, ¡tanta era la afrenta! Pero vive, no ha muerto, su pueblo es rebelde, su pueblo es digno, su pueblo es fiel a su recuerdo; hay cubanos que han caído defendiendo sus doctrinas, hay jóvenes que en magnífico desagravio vinieron a morir junto a su tumba, a darle su sangre y su vida para que él siga viviendo en el alma de la patria. ¡Cuba, qué sería de ti si hubieras dejado morir a tu Apóstol!
En cuanto a mí, sé que la cárcel será dura como no la ha sido nunca para nadie, preñada de amenazas, de ruin y cobarde ensañamiento, pero no la temo, como no temo la furia del tirano miserable que arrancó la vida a setenta hermanos míos. Condenadme, no importa, La historia me absolverá.