La revelación de los lazos del primer ministro turco Recep Tayyip Erdogan con al-Qaeda está provocando un verdadero terremoto político en Turquía. No sólo Ankara respaldaba muy activamente el terrorismo en Siria sino que además lo hacía en el marco de una estrategia de la OTAN. Para Thierry Meyssan, el escándalo muestra también el carácter completamente ficticio de los grupos armados que agreden al Estado y el pueblo sirios. Yasin al-Qadi, el banquero de al-Qaeda, era amigo personal tanto del ex vicepresidente de Estados Unidos Dick Cheney como del actual primer ministro de Turquía Recep Tayyib Erdogan.