Me pregunto qué sentido tiene hoy la celebración del 1º de Mayo si en espacio y tiempo, se plantea una situación similar a la planteada hace un siglo y medio, salvo que en aquel entonces se podía aspirar a superar los conflictos con una revolución. El “estado de las cosas” de la actualidad queda resumido magníficamente en esta expresión lanzada por el expresidente José Mujica, al diario El País de Madrid en inicios de 2014: “Los presidentes somos juguetes del poder financiero global”.