Felipe González partió en su exposición de una premisa clara: «América está amenazada por el cáncer que representa Nicolás Maduro», dijo. Poco después, desestimaba la utilidad de las rondas de diálogo celebradas en Noruega entre el Gobierno venezolano y la oposición. «¿Tengo esperanza con Noruega? Poca. El diálogo está mal planteado y permite a Maduro ganar tiempo»,opinó el exmandatario.