Suecia vendió su alma al diablo
Suecia, país escandinavo, que se caracterizaba por tener una neutralidad frente a los grandes bloques que se formaron después de la Segunda Guerra Mundial, ahora entregó la oreja. Es decir, vendió su alma al diablo.
Suecia, país escandinavo, que se caracterizaba por tener una neutralidad frente a los grandes bloques que se formaron después de la Segunda Guerra Mundial, ahora entregó la oreja. Es decir, vendió su alma al diablo.