En palabras de las teólogas Brown & Parker “Si la mejor persona que ha vivido dio su vida por otros, entonces, para ser valiosos, también debemos sacrificarnos. Cualquier noción de que tenemos el derecho de cuidar de nuestras propias necesidades está en conflicto con ser un fiel seguidor de Jesús”. Entonces si es que como mujer estoy sufriendo una situación abusiva, violencia de pareja o discriminación laboral, debo aprender a ser mansa, a “tomar mi cruz” y lograr mi redención a través de mi sufrimiento y sacrificio… por mis hijos, por mi marido, por mi comunidad, etc.